¡Descubre por qué eres más linda que los registros propios que guardas!
Las neuronas espejo desarrollan la empatía y la emoción, nos permiten imitar y ponernos en el lugar de otro, muchas se encuentran en la denominada área de broca – relacionada con la producción del lenguaje- y otras zonas relacionadas con la visión y la memoria. En las mujeres, la zona de la corteza en la que están las neuronas espejo es mayor y está más activa que en los hombres. Por eso poseen mayor cantidad.
Sólo el 4% de las mujeres está conforme con su imagen y se siente atractiva, el resto, casi todas; ¡suele verse poco llamativas y con facilidad resaltan más los defectos físicos que las virtudes que tienen!
Las investigaciones de mercado dicen que el 59% de las mujeres admite que siente presión para ser más bellas y el 32% admite que esa presión proviene de ellas mismas.
Cuando haces una proyección psicológica sobre ti misma, sueles ser más exigente, que la mirada que otros pueden reflejar sobre tu imagen.
Neuronas espejo: Caso Marca Dove
La marca Dove realizó una campaña viral para mostrar el efecto de las miradas propias y la llamó: ¡Eres más hermosa de lo que piensas!
Contrató a un artista forense de larga experiencia en el FBI para el experimento. El artista dibujó a varias mujeres según ellas mismas se describían y luego según como las veían los demás. En prácticamente todos los casos, los resultados finales fueron sensiblemente distintos…
Cuando las mujeres se describieron, las imágenes resultaron poco atractivas, mientras que, en los otros casos, los dibujos fueron drásticamente distintos. Las mostraban mucho más bellas.
Al finalizar el ejercicio, las mujeres pudieron observar ambos bosquejos: cómo se veían ellas y cómo lo hacían los demás.
El experimento demostró algo muy importante: ¡Las mujeres son más lindas de lo que piensan!
La mayor cantidad de neuronas espejos que tienen las mujeres, les permite ponerse mejor en el lugar del otro y además, identificar rápidamente todo aquello bueno que pueden imitar.
Por esto, las mujeres suelen construir parámetros de belleza mayores en otra persona que sobre ellas mismas. Esto genera un reflejo en el otro que te permite sentirte identificada y ampliar las posibilidades de comprensión y comunicación.
Según experimentos realizados por la Universidad del Estado de San Francisco en los Estados Unidos, bastan sólo veinte segundos en contacto con una persona para recibir una impresión emocionalmente fuerte de ella. Durante los cinco minutos siguientes se amplía el impacto en un 50% de que esa proyección sea negativa o positiva. Esto significa que durante los primeros veinte segundos se genera una marca en la mente de una persona que perdurará a lo largo del tiempo.
Las mujeres en esos 20 segundos iniciales, se concentran en identificar aspectos positivos que les permita vincularse rápidamente con el reflejo de la otra persona. Por esto, las marcas enfocadas en productos femeninos trabajan con mujeres referentes icónicas que generan rápidamente un reflejo aspiracional.
(*) Marcela Seggiaro. Consultora Especialista en Retail Design, Visual Merchandising y Construcción de marcas. Contacto. [email protected]
Sígueme en las redes: